He de quererme para querer.
Buenos días amig@s.
Feliz martes.
Pienso que si nos valoramos y respetamos, sin compararnos con nadie, logramos el cariño y el respeto de los demás.
Cuando tenemos una responsabilidad, y hemos de distribuir trabajos a personas que forman parte de objetivos a cumplir, debemos hacerles llegar que todos son necesarios para cumplir dichos objetivos.
Que se sientan importantes y sepan que valoramos y agradecemos sus trabajos.
Ser cercanos a ellos, no está reñido con el respeto mutuo, y les transmiten que somos accesibles a sus inquietudes.
La palabrería cansa.
Nuestras vidas y actitudes, deben ser un claro mensaje que inspiren a los demás a ser mejores personas, más sensatas y felices.
Un abrazo.