Resiliencia en nuestra vida

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Buenos días amig@s. Feliz miércoles.

Cuántas veces oímos de una persona “este es un infeliz”, (no estoy de acuerdo con esta expresión, porque creo que denota un aspecto prepotente y déspota por quien la expresa), pero observando la realidad se da en aquellas personas que en su vida no han tenido ninguna diversidad por sobreprotección. Nadie sabe de que son capaces, ni ellos mismos siquiera. Hoy en día los que viven plácidamente con cierta “comodidad” fruto de objetivos justamente cumplidos, han vivido tiempos difíciles, muchas adversidades… pero han salido adelante y están orgullosos de las dificultades pasadas, porque esas dificultades han sido experiencias formativas que los convirtieron en lo que son ahora.

Cuando las desgracias se padecen y se superan, se comprenden mejor nuestras capacidades y nuestra fuerza interior.

Pasar una “prueba de fuego” nos fortalece, porque sabemos que en el futuro podremos sobrevivir a una adversidad similar.

Preocupémonos lo justo ante la situación social que padecemos. Puede que sea una experiencia formativa, que si evaluamos objetivamente, más tarde agradeceremos.

Un abrazo.

El hombre ¿nace o se hace?

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Buenos días amig@s. Feliz martes.

Onomástica de los Cosme y Damián. Felicidades.

No podemos enfrentarnos a la vida, al día a día con poco entusiasmo.

El hombre noble, responsable, coherente…, no se hace de repente, sino que ha de “entrenarse constantemente para estar en forma”, para estar preparado y no precipitarse a la buena de Dios hacia lo que NO conviene.

Debemos estar preparados para lo que la vida nos tenga reservado. Así cuando aparezca cualquier circunstancia traumática, o acontecimiento adverso sabremos adaptarnos con fortaleza y no nos detendremos hasta superarlo felizmente. 

Un abrazo

 
 

El sentido del humor

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Buenos días amig@s. Feliz miércoles.

Cuando recibimos una noticia inesperada, incomoda, frustrante, dolorosa…, a veces empleamos la expresión “no se si reir o llorar”.

Pienso que sea cual sea la noticia , es positivo tener una actitud alegre, es preferible reírse, aunque para la mayoría sea motivo de victimismo y lloriqueos. Casi todos las situaciones ofrecen más oportunidades de reír que de llorar.

El sentido del humor es beneficioso  y nos permite restar importancia a las cosas. Los sucesos más desafortunados pueden resultar positivos, es cuestión de una vez “aguantado el chaparrón”, evaluar y preguntarse: ¿qué me enseña esta situación?.

Un abrazo

 
 

Avanzar es el camino

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Buenos días amig@s. Feliz martes.

Pienso que seríamos más felices, que llevaríamos una vida más plena si buscáramos la sabiduría, la verdad, sin importarnos de donde proceda el concepto o el pensamiento que nos ayude a ello: ganar en sabiduría y en verdad.

Lo que debe importarnos es si nos ayuda a mejorar nuestra vida, si transforma  en positivo, nuestro comportamiento personal y social.

Damos demasiada importancia a la afiliación o reputación de quien procede el fragmento o pensamiento que llega a nuestras manos.

¡Cuanto más aprenderíamos si solo nos enfocáramos en el mérito de la frase o pensamiento!

Aprovechemos todas las fuentes que nos hagan avanzar en el camino de la sabiduría y ser verdad.

Un abrazo

La máscara

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Buenos días amig@s. Feliz lunes.

Me preguntaba ¿quién no ha usado en algún momento de su vida una máscara?

La máscara la usamos para que en verdad no nos reconozcan como somos.

Muchos nos hemos convertido con el tiempo en expertos en el uso de máscaras. Sabemos bien cual usar de acuerdo con quien estamos y la situación que vivimos. Pienso que las máscaras más usadas y con las que nos encontramos en la sociedad son:

Máscara de poder: Muchos la usan para convencernos de su poder diciendo “yo soy íntimo del director, dueño..”

Máscara de superioridad: la utilizan aquellos que necesitan impresionar, demostrar, sobresalir…

Máscara de víctima: la usan aquellos que nunca sonríen, que piensan que todo les pasa solo a ellos, que nadie podrá igualarles en fatalidades.

Estas personas son tóxicas. Necesitan cada vez  más máscaras para representar el papel que quieren que los demás crean de ellos.

En realidad las máscaras terminan ridiculizando la vida. En esa hipocresía en que la mayoría viven, se olvidan de mejorar como son en realidad.

¡SEAMOS NOSOTROS MISMOS!

Un abrazo